Como parte de su ofensiva el presidente Donald Trump firmó el jueves 28 de mayo una orden para limitar la inmunidad de la que gozan las empresas de redes sociales por los contenidos que se comparten en ellas.
El presidente estadounidense atribuye a redes sociales como Facebook y Twitter un sesgo progresista, al firmar el documento afirmó que es para defender la libertad de expresión.
“No existe un precedente en la historia de Estados Unidos en que un número tan pequeño de corporaciones controle una esfera tan grande las interacciones humanas”, añadió.
El documento refiere que las redes sociales hacen “censura selectiva” por lo que pide a las agencias federales revisar la sección 230 de la Ley de Decencia de las Comunicaciones, misma que protege a las empresas del contenido que crean o comparten los usuarios.
Asimismo, ordena a los reguladores federales revisar “las prácticas injustas y engañosas” de redes como Facebook y Twitter, así como sancionarlas si no son ecuánimes en sus prácticas editoriales, de acuerdo a juicio del Gobierno.
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) May 29, 2020
El martes pasado, Twitter y el presidente Trump tujvieron un desencuentro cuando la compañía marcó una serie de twits del mandatario como contenido dudoso y recomendó contrastar la información.
Para el miércoles, el mandatario estadounidense reviró acusando a la red social de interferir en el proceso electoral. “las grandes tecnológicas hacen todo lo que les permite su considerable poder para censurar de cara a las elecciones de 2020. ¡Nunca sucederá!”, sentenció en el mismo Twitter.
Aunque Jack Dorsey, director ejecutivo y fundador de Twitter, defendió la decisión, el director de Facebook, Mark Zuckerberg expresó durante una entrevista para la televisora Fox, que las empresas como Facebook “no deberían ser el árbitro de la verdad de todo lo que la gente dice en internet.”
No obstante, Zuckerberg puntualizó, “en general creo que un Gobierno que elige censurar es porque están preocupados y no me parece la reacción correcta”.
De llevarse a cabo el cambio legislativo causaría un gran impacto en la libertad de expresión señalan expertos, además de que será duramente peleado en Tribunales por los afectados.