El grupo de historiadores Chuunt’aan Maya reviró al presidente Andrés Manuel López Obrador, la guerra no ha terminado “porque es cierto que ya no somos esclavos en las haciendas, pero hay muchas cosas que continúan: siguen talándonos los montes para sembrarlos de soya, siguen quitándonos los montes y cenotes que hemos defendido y cuidado desde tiempos inmemoriales, y lo peor, aunque hemos metidos innumerables amparos y otros recursos jurídicos, siguen sin querer aceptar que tenemos derecho a decidir qué es lo que queremos para nuestras vidas y nuestro futuro. ”
En una carta dirigida al mandatario, el Chuunt’aan Maya agrega, “quizá tu petición de perdón pueda ser la oportunidad para sentarnos a conversar sobre lo que te venimos pidiendo desde hace varias cartas ya: que se respete nuestro derecho a la libre determinación”.
En la ceremonia de Petición de perdón por agravios al pueblo Maya, fin de la Guerra de Castas, el mandatario destacó que, «todos los pueblos originarios de México, hasta la actualidad, han sufrido la explotación, el despojo, la represión, el racismo, la exclusión y las masacres, pero los yaquis y las mayas han sido, para vergüenza de todos, los peor tratados, las víctimas de la mayor crueldad» y aseguró que la guerra había terminado.
“Por un imperativo de ética de gobierno, pero también por convicción propia, ofrecemos las más sinceras disculpas al pueblo maya por los terribles abusos que cometieron particulares y autoridades nacionales y extranjeras en la Conquista, durante los tres siglos de dominación colonial y en dos siglos del México independiente”, expresó López Obrador ayer desde Quintana Roo, en el Museo de la Guerra de Castas, en el municipio de Felipe Carrillo Puerto.
Recordó que durante el Porfiriato se despojó a las comunidades indígenas para beneficiar a particulares, nacionales y extranjeros.
Aunque todavía hay mucha pobreza en la región, reconoció, hay voluntad de hacer justicia como en los tiempos de la Revolución, por eso “jamás vamos a olvidar a los pobladores del México profundo. Por el bien de todos, primero los pobres, y arriba los de abajo y abajo los privilegios”, exclamó.
Añadió que por la veda electoral no podía mencionar los programas sociales de los que ahora son beneficiados.
Durante el acto se hicieron presentes manifestantes que desde fuera del recinto hacían reclamos al gobierno federal y local. Ejidatarios y jóvenes de la región lograron increpar al mandatario en su paso al recinto y le exigieron el pago de las tierras que se les expropiaron para la construcción de vialidades. Además, reclamaron al presidente que la ceremonia fuera a puerta cerrada en la que los maya no pudieron escuchar sus palabras.
En el acto estuvo el presidente de la República de Guatemala,Alejandro Eduardo Giammattei Falla, así como la secretaría de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubón, El director general del Instituto Nacional de Pueblos Indígenas, Adelfo Regino Montes, la representante del pueblo maya, Ana Karen Dzib Poot, así como los gobernadores de Tabasco, Chiapas, Campeche y Yucatán, entidades por las que transitará el Tren Maya.
