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Repercusiones en México del Covid-19

Antecedentes

Los primeros casos de Covid-19 reportados a la Organización Mundial de la Salud (OMS) fueron detectados entre el 19 y el 29 diciembre de 2019 en la provincia de Wuhan, capital de la provincia de Hubei, China y fueron reportados como una neumonía atípica. En los humanos, el virus tiene su principal impacto en las vías respiratorias, suele acompañarse de fiebre alta y puede generar graves problemas en los pulmones. Después de varias investigaciones, el 5 de enero de 2020, China dio a conocer que estos casos de neumonía atípica no corresponden al SARS ni al MERS. La Comisión de Salud Municipal de Wuhan informó que se inició una investigación retrospectiva sobre el brote. Dos días después se informó que la nueva enfermedad se había identificado como un nuevo tipo de coronavirus. El 11 de enero se anunció la primera víctima mortal por Covid-19 en China.

El 13 de enero se reporta el primer caso de contagio del virus fuera de China, en Tailandia, de un ciudadano chino procedente de Wuhan. El segundo caso similar se reportó el 16 de enero de 2020 en Japón, un ciudadano japonés que recién había regresado de un viaje a Wuhan. Para el 23 de enero las autoridades chinas declararon en cuarentena la provincia de Hubei, con el fin de evitar la propagación del brote del Covid-19. El 30 de enero la OMS declara al nuevo brote de coronavirus como una emergencia de salud pública de importancia internacional. El 7 de abril China registra su primer día sin fallecidos por Covid-19 y al día siguiente levanta oficialmente la cuarentena en China, aunque con severas medidas de control y limitaciones para la población.

 

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El 11 de marzo de 2020, al confirmar 118,000 casos en 114 países, el director de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, declara pandemia al Covid-19, explicando la gravedad de la situación en los rubros de la salud, la economía y lo social, anunciando que para superar esta crisis se necesitaba la participación conjunta de los gobiernos y la sociedad. Desde la OMS hemos llevado a cabo una evaluación permanente de este brote y estamos profundamente preocupados tanto por los alarmantes niveles de propagación y gravedad, como por los alarmantes niveles de inacción. Por estas razones, hemos llegado a la conclusión de que la Covid-19 puede considerarse una pandemia […] Todos los países deben encontrar un delicado equilibrio entre la protección de la salud, la minimización de los trastornos sociales y económicos, y el respeto de los derechos humanos. El mandato de la OMS es promover la salud pública. No obstante, estamos colaborando con un gran número de asociados de todos los sectores para mitigar las consecuencias sociales y económicas de esta pandemia. Esto no es solo una crisis de salud pública, es una crisis que afectará a todos los sectores, y por esa razón todos los sectores y todas las personas deben tomar parte en la lucha”.

 

Tecnología vs. Covid-19

 

Uno de los temas que más ha llamado la atención en esta crisis sanitaria es la apuesta de China por la tecnología para controlar el avance del contagio del Covid-19, que van desde robots repartiendo comida en los hospitales hasta cámaras de reconocimiento facial que controlan la temperatura de las personas y drones que vigilan que la gente cumpla con la cuarentena. Una de estas herramientas tecnológicas se llama Suishenban, una aplicación obligatoria para las personas que quieran tener acceso a servicios públicos y privados. La aplicación genera un código QR en tres colores:  verde, disponible sólo para quienes en los últimos 14 días no han visitado ninguna zona de riesgo y da acceso a todos los servicios; amarillo, restringe el acceso a servicios no esenciales, disponible para quienes se han trasladado en las últimas dos semanas, pero no han visitado las regiones más afectadas; rojo, asignado a los usuarios que deben permanecer en cuarentena. En las zonas en cuarentena, los datos de localización de los teléfonos se utilizan para rastrear los movimientos de las personas, si una persona viola la cuarentena, las autoridades reciben una alerta, entre otros datos, del movimiento de las personas. Violar estos códigos acarrea sanciones de carácter penal.

 

La aplicación oficial rastrea todos los movimientos de los ciudadanos a partir de la Tarjeta de Identidad Nacional que se confirma con un sistema de reconocimiento facial y utiliza sistemas big data y de inteligencia artificial. Combina la información guardada en las bases de datos de transporte público y de otros departamentos gubernamentales como la Comisión de Sanidad o la Policía con el posicionamiento recogido por las operadoras de telefonía y el propio GPS del dispositivo. Algunos especialistas en derechos humanos han expresado su preocupación, ya que consideran que este uso excepcional de los datos personales se extienda para que el gobierno chino fortalezca su sistema de vigilancia una vez controlada la pandemia.

 

Europa

 

El primer caso de Covid-19 en Europa se reportó en Francia, el 24 de enero. Los países más castigados por el Covid-19 en el continente europeo son Italia y España. El 31 de enero se reportan los primeros casos en Roma, cuando dos turistas chinos dieron positivo a la prueba de coronavirus. El tercer caso de covid-19 en aquel país fue detectado en un ciudadano italiano que fue repatriado de Wuhan. El 21 de febrero, algunas localidades ubicadas al norte de Italia, Lombardía y Véneto específicamente, entran en cuarentena. En ese momento el país europeo apenas contaba con 16 casos confirmados y 250 sospechosos enviados a observación.

 

El 10 de marzo las autoridades italianas extienden la cuarentena a todo el país. El decreto oficial prohíbe expresamente las aglomeraciones de personas en lugares públicos; exige un documento para que la gente pueda trasladarse de una ciudad a otra únicamente en los siguientes casos: trabajo, salud o algún caso de emergencia; se extiende la suspensión de escuelas en todo el país; se prohíben los eventos deportivos en áreas públicas y privadas; las personas deben mantener una distancia de un metro entre sí, mientras que las personas de la tercera edad deben quedarse en casa; se cierran los bares y restaurantes, teatros y otros centros de reunión, educativos y religiosos. El gobierno garantizó el abasto de alimentos, por lo que los ciudadanos podrán salir únicamente a realizar compras habituales de estos productos.

 

“Las autoridades italianas prevén el final de la cuarentena para mayo de manera gradual. El primer ministro italiano, Giuseppe Conte, informó que los ciudadanos podrán salir de sus casas a principios de mayo adoptando medidas de distanciamiento social y uso de cubrebocas hasta que se cuente con una vacuna.”

 

A mediados de marzo, Italia supera a China en el número de fallecidos por Covid-19, hasta el 19 de marzo en Italia habían fallecido 3,405 personas, mientras que en China el número de decesos ascendía a 3,249. A finales de marzo, se decide aumentar las sanciones a quienes violen la cuarentena, a partir del 25 de marzo, las multas serán de entre 400 y 3000 euros. En la localidad de Treviolo, ubicada al norte de Italia, las autoridades deciden utilizar drones para detectar personas que violen la cuarentena, estos artefactos incluso toman la temperatura de las personas, aunque de una manera poco precisa, lo que abre un debate sobre una posible violación a los derechos individuales.

Las autoridades italianas prevén el final de la cuarentena para mayo de manera gradual. El primer ministro italiano, Giuseppe Conte, informó que los ciudadanos podrán salir de sus casas a principios de mayo adoptando medidas de distanciamiento social y uso de cubrebocas hasta que se cuente con una vacuna. Mientras que la reapertura total de los negocios podría darse entre el 11 y el 18 de mayo y las restricciones de circulación se levantarían completamente a mediados del mismo mes. Estas medidas se aplicarán de manera casi inmediata en el centro y sur del país; en el norte será más lento debido a que en esa región se concentra el 70% de las víctimas totales.

En cuanto a España, el 31 de enero una persona de ciudadanía alemana fue reportada como el primer paciente con Covid-19 en ese país. El 15 de marzo el presidente del gobierno español,  Pedro Sánchez, declaró estado de alarma en todo el territorio español e informó que la circulación de ciudadanos en vías públicas se limitaría a los siguientes casos: adquisición de alimentos, productos farmacéuticos y de primera necesidad; asistencia a centros, servicios y establecimientos sanitarios; desplazamiento al lugar de trabajo; retorno al lugar de residencia; asistencia a mayores y menores de edad, personas con discapacidad o vulnerables, entre otros.

Las sanciones impuestas por las autoridades españolas a los ciudadanos que decidan romper con la cuarentena irán de los 100 euros hasta un año de prisión, y se remiten a cuatro preceptos: el primero es la Ley de Seguridad Ciudadana, abarca las sanciones más bajas que se aplican a quienes retiren vallas o encintados u otros elementos fijos o móviles colocados por las fuerzas de seguridad. El segundo es el de la Ley de 2011 sobre Salud Pública, se aplica a quienes realicen conductas u omisiones que puedan producir un riesgo o un daño grave para la salud de la población. El tercero es la Ley de 2015 del Sistema Nacional de Protección Civil que impone multas consideradas graves por el incumplimiento de las órdenes, prohibiciones, instrucciones o requerimientos de la autoridad y cuando no se colabore con los servicios de vigilancia y protección de las empresas públicas o privadas. El último se remite al artículo 556 del Código donde se imponen sanciones de cárcel a quienes desobedezcan o se resistan gravemente a las autoridades.

Para el 26 de marzo, España se convierte en el segundo país con más muertes en el mundo, sólo debajo de Italia, por Covid-19 con 4,089 fallecidos, superando de esta manera a China que tiene 3,285. El 22 de abril, Pedro Sánchez informa que se ha estado trabajando en un plan para levantar el confinamiento. Dijo que a partir del domingo 26, los niños podrán salir únicamente acompañados de un adulto, a una distancia de no más de un kilómetro tomando en cuenta su lugar de residencia, incluso podrán realizar actividades recreativas. Se les pide aplicar rigurosamente las medidas para evitar contagios: distancia de dos metros de otras personas, lavado frecuente de manos y mantener una higiene estricta en los espacios públicos. Los niños con fiebre o con síntomas compatibles con el Covid-19 tendrán que permanecer en sus casas.

 

Estados Unidos

A pesar de haberse denunciado la gravedad de la pandemia en China y en Europa, Estados Unidos es hoy el país que más casos tiene detectados con el virus y el que más decesos ha reportado. El gobierno de ese país tomó medidas preventivas contra el Covid-19 a partir del 17 de enero, cuando los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) junto con el Servicio de Aduanas y Protección de Fronteras (CBP) del Departamento de Seguridad Nacional comenzaron a implementar exámenes de detección de síntomas del Covid-19 en los aeropuertos de San Francisco, Nueva York y Los Ángeles, a viajeros provenientes de Wuhan. El 21 de enero se detecta el primer caso de Covid-19 en Estados Unidos, el paciente es un hombre norteamericano que había viajado a China.

En el inicio de la pandemia en EE. UU., Donald Trump se mostraba confiado en que su país superaría la crisis de manera relativamente rápida, incluso en el aspecto económico. Sin embargo, a partir de que la OMS declara al Covid-19 como pandemia, se desvanece paulatinamente el optimismo en las declaraciones del mandatario y responde al confinamiento decretado por California y Nueva York, el 19 y 22 de marzo respectivamente, con la siguiente declaración: “No podemos dejar que la cura sea peor que el problema mismo”.

El 20 de marzo, el Secretario de Estado, Mike Pompeo, informó en rueda de prensa encabezada por Trump el cierre de la frontera con México a viajes por motivos no esenciales, quedando abierta sólo al comercio y a los trabajadores del sector salud, como ya lo había hecho unos días antes con Canadá. Esta medida se extiende hasta el 19 de mayo.

  1. UU. supera, en abril 19, las 40 mil víctimas mortales por Covid-19, lo que lo convierte en el país más castigado por el virus. Nueva York es la ciudad más afectada con cerca de 15 mil decesos. Mientras tanto, se generan protestas ciudadanas que exigen levantar la cuarentena y regresar a las actividades cotidianas por temor a una crisis económica severa. En Washington se reportaron alrededor de 2,500 asistentes a la protesta; mientras que en Colorado, trabajadores del sector salud impidieron el paso de los manifestantes en una clara confrontación a la decisión de no respetar la cuarentena. El 23 de abril el Congreso aprobó un plan de rescate de 500 mmdd que serán destinados a hospitales y pequeñas empresas frente a la compleja situación. El Departamento de Trabajo informó que a finales de abril, 26 millones de personas habían solicitado el subsidio de desempleo. Las sanciones impuestas a personas que violan la cuarentena abarcan multas por delitos menores que van de los 400 a los 5,000 dólares dependiendo el estado.

 

Presencia del Covid-19 en México

 

Después de que se dio a conocer la existencia del virus que afectaría a todo el mundo, el gobierno de México aseguró que se estaban tomando las medidas sanitarias requeridas para mitigar los riesgos. No obstante, la tensión comenzó a subir una vez confirmados los primeros casos de infectados en el país. El 28 de febrero se dio a conocer el primer caso de Covid-19 en la CDMX, un hombre de 35 años que había realizado un viaje a Italia. A partir de ese momento entramos en la fase 1 con transmisión baja y rastreable, pero el Subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell Ramírez, anticipaba que la entrada de las fases 2 y 3 serían inevitables.

 

Mientras que en Europa, Estados Unidos y en América Latina se tomaban decisiones drásticas, en México el gobierno recibía críticas por no atender con la seriedad que se requería el tema. En la fase 1 las giras presidenciales continuaban. Incluso hubo declaraciones del presidente AMLO como “Hay que abrazarse, no pasa nada”. A pesar de que las acciones se endurecían en otras regiones del mundo, el gobierno mexicano no tenía una línea clara de acciones.

 

Fue hasta el 30 de marzo que se declaró emergencia sanitaria y la suspensión de actividades no esenciales hasta el 30 de abril. En este momento el presidente llamaba a la población a quedarse en casa, aunque la medida se instruyó desde mediados de marzo, la postura gubernamental siempre ha sido no obligar a la población a no salir, “nada por la fuerza”, reiteraba López Obrador, medida que se replicó en la mayor parte del país.

 

El 21 de abril, el Subsecretario de Salud declaró la fase 3 de la contingencia y la extensión de la Jornada de Sana Distancia hasta el 30 de mayo. En esta fase se acumularán gran número de casos de contagios y de hospitalizaciones. Por su parte, el Secretario de Educación Pública informó que el 1 de junio todos los estudiantes de nivel básico regresarían a clases y el año escolar finalizaría el 17 de julio. Finalmente, en una declaración informal, AMLO afirmó que la contingencia podría extenderse hasta el mes de agosto.

 

Un día después de ser declarada la fase 3 de la contingencia sanitaria, AMLO firmó un decreto con medidas para enfrentar la crisis, “bajo los criterios de eficiencia, honestidad, justicia y aplicando con rigor la Ley de Austeridad Republicana». Con el decreto se blindan programas sociales y proyectos prioritarios en 622 mil 565 millones de pesos; al mismo tiempo, se otorgarán tres millones de créditos a la población más necesitadas y a la clase media. Las medidas, dijo el mandatario, aplican para todo el Poder Ejecutivo federal, incluye a organismos descentralizados, órganos desconcentrados, empresas de participación estatal mayoritaria y fideicomisos públicos. La vigencia del decreto es hasta el 31 de diciembre del 2020 y establece que:

 

Se reducirá el salario de altos funcionarios públicos hasta un 25% de manera progresiva, de igual forma, no recibirán aguinaldo ni prestaciones de fin de año (aplica desde subdirectores hasta el Presidente de la República).

 

  • Se cancelan 10 subsecretarías sin dejar sin trabajo y manteniendo el mismo rango e ingresos a quienes dejarán los cargos.
  • Se extiende la suspensión de labores con goce de sueldo al personal que ya se encuentra en esa condición, debido a la pandemia, hasta el 1 de agosto.
  • Permanecen cerradas las oficinas a excepción de las esenciales para el beneficio de la gente.
  • Los programas sociales prioritarios seguirán recibiendo apoyos; la Guardia Nacional. Además de los proyectos como el Aeropuerto, Dos Bocas, rehabilitación de refinerías. En total son 38 programas que continuarán.
  • SHCP dispondrá de los recursos para entregar las participaciones federales a los estados, nómina, pensiones y la amortización y servicio de la deuda pública.
  • Tendrán trato excepcional la Secretaría de Salud, la Guardia Nacional y las secretarías de Marina y Defensa Nacional.

Al cierre de esta edición el conteo oficial de casos de Covid-19 en México era de 15,529 personas contagiadas y 1,434 decesos. Se espera que durante este mes la curva llegue a su pico más alto. El presidente AMLO ha dicho coloquialmente que confía en seguir domando la epidemia, a pesar de que la OMS asegura que la crisis está lejos de haber terminado y de que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) afirma que México es el país del grupo que menos pruebas realiza.

 

 

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