“La humanidad se encuentra en el esfuerzo por erradicar hasta donde sea posible estas formas de violencia que tanto dañan a las personas y que tienen un impacto tan profundamente negativo en su mente, en su espíritu, en la forma como se perciben a sí mismas y en su desarrollo social.”
Existen muchos tipos de violencia, pero ha sido específicamente la identificada contra la mujer, la que ha encontrado especial atención en el mundo. En efecto, la violencia forma parte de todas las sociedades de las que se tiene registro. De hecho, es una aspiración fundamental del mundo civilizado sustituir la fuerza por los argumentos, a los golpes por las razones, a la imposición por el debate.
Es la indignación que genera la fuerza del más poderoso, en contraste con la falta de representatividad de los más débiles, lo que hizo nacer los sistemas democráticos en sus orígenes, buscando escuchar a todas las voces antes de tomar decisiones. Tal violencia se ha ejercido sobre el más vulnerable por muchos años, tomando esa debilidad forma de niños, minusválidos y minorías en general.
Actualmente, la humanidad se encuentra en ese esfuerzo por erradicar hasta donde sea posible estas formas de violencia que tanto dañan a las personas y que tienen un impacto tan profundamente negativo en su mente, en su espíritu, en la forma como se perciben a sí mismas y en su desarrollo social. Pero ha sido en particular la violencia contra la mujer la que ha logrado tener una agenda mundial, estar en boca de todos y moldear políticas públicas, programas sociales, atención y destino a sus específicas necesidades.
No es difícil identificar las causas de las mujeres en los planes de trabajo de la mayoría de los partidos políticos de los distintos países del orbe, lamentablemente, ahora muchos de ellos las utilizan como instrumento para alcanzar el voto, más que como genuina razón para cambiar paradigmas. El valor de las mujeres está fuera de toda discusión, son piedra angular de nuestra especie y son quienes llevan la mayor carga en el proceso natural de procreación de una nueva vida humana.
Bajo ese crisol, las realidades han cambiado diametralmente. Ahora tenemos humanos deseando ser mujeres, a pesar de haber nacido bajo otro sexo; mujeres que no desean saber nada de maternidad por razones diversas; y una innumerable lista de acciones que tienen que ver con este cambio de papeles, roles y estereotipos en nuestros tiempos modernos. Ello ha sido aplaudido por una gran parte de la humanidad y condenado por otra, nutriendo los diálogos de sobremesa al interior de las familias, mismas que también han cambiado bastante su constitución.
Han sido los derechos de las mujeres los que han cambiado la forma que tenemos de ver y entender el mundo, bajo una nueva realidad que de origen busca eliminar la violencia contra ellas, en contraste, sus marchas siempre van acompañadas de violencia desbordada, a veces generadas por otras activistas de las mismas causas. Sin pretender hacer juicios de valor en lo anterior, llama poderosamente la atención que ahora pareciera que son las causas de la mujer las que llevarán el debate político de las próximas elecciones en todos los países.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha concretado una agenda muy interesante sobre las mujeres, el 25 de noviembre se celebra a nivel mundial el Día Internacional de la Violencia contra la Mujer. Si bien es cierto que ponerse una camisa naranja ayuda a visibilizar una postura ideológica individual, pueden más las acciones concretas que se realicen para llevar esa aspiración a buen puerto.
Es importante recordar que la violencia puede ser física, sexual y psicológica. Obligatoria es la lectura sobre la Declaración de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer emitida por el máximo órgano de la ONU en 1993, así como la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia emitida por el Congreso mexicano en 2007.Creo que todos tenemos recuerdos y anécdotas familiares de cómo fueron educados nuestros abuelos, nuestros padres y, de primera mano, como nos educaron a nosotros.
“El debate es largo, las consideraciones bien documentadas, pero la causa de la mujer debe permanecer en su esencia, por más que el mundo político intente obtener beneficios en su nombre.”
En esas reflexiones orales hay mucha información que da cuenta de la violencia específica sobre las mujeres y la limitación a sus aspiraciones de desarrollo social, laboral y empresarial considerando su papel biológico predeterminado, cuando en realidad, lo único predeterminado es la absoluta libertad para decidir el propio futuro. El debate es largo, las consideraciones bien documentadas, pero la causa de la mujer debe permanecer en su esencia, por más que el mundo político intente obtener beneficios en su nombre. Es vital saber distinguir y aprender a visibilizar que el uso de las causas femeninas para otros fines, también es una forma de violencia contra ellas.
En el tracklist de noviembre no pueden faltar La Oreja de van Gogh, Bebe, Gloria Trevi, Natti Natasha, Natalia Jiménez, Fanny Lu, María León, Beyonce, Laura Pausini, Natalia Oreiro, Thalía, Fangoria, Danna Paola, Mónica Naranjo, Paulina Rubio, Mon Laferte, Kany García, Ha Ash, Martha Sánchez, entre otras voces que han brindado melodías con profundo y gran significado a las causas femeninas.
El 25 de noviembre no olvides tu camisa o blusa naranja, pero tampoco olvides sumarte con acciones pequeñas, pero concretas, al compromiso de eliminar toda forma de violencia contra la mujer.
