Los recientes resultados electorales, y las propuestas de reforma constitucional, plantean un reto al constitucionalismo mayoritario en México, que al menos en su vertiente académica, es mayoritariamente principialista o garantista; si bien hay desde luego quienes se adscriben al “Nuevo constitucionalismo latinoamericano”, o nos reconocemos constitucionalistas dialógicos.
No hay una “academia jurídica”, existen diversas academias jurídicas, las y los juristas nos hemos dado la oportunidad de pensar de forma independiente; y aunque hayamos sido formados en una cierta tradición, nada impide que nos la cuestionemos y, en su caso, o la enriquezcamos o mudemos de convicción.
En todo caso, los debates constitucionales de los siguientes años serán muy interesantes. Vamos a discutir auténticamente acerca de los temas más importantes de la epistemología constitucional, que son: ¿qué es una constitución? Y ¿para qué sirve una constitución?
Pensando en lo anterior, me permito lanzar 10 preguntas que me giran en la cabeza:
- ¿Dónde reside la soberanía?
- ¿Qué relación hay entre la Constitución y los tratados internacionales?
- ¿Cuál es el procedimiento adecuado para aprobar los tratados internacionales?
- ¿Qué relación existe entre la Constitución y las sentencias dictadas por los tribunales internacionales?
- ¿Las cortes internacionales pueden imponer modelos de interpretación y argumentación?
- ¿Existe un único interprete final de la Constitución?
- ¿Hasta dónde el pueblo (no sólo la ciudadanía) puede participar en la determinación del contenido, límites y alcances de los derechos humanos?
- ¿Cuál debe ser el alcance de la justicia constitucional en casos particulares?
- ¿Cuál debe ser el alcance de la justicia constitucional cuando se impugnen normas generales?
- ¿Cuál será el paradigma constitucional dominante en los próximos años?
No piense usted que serán meras discusiones académicas; de hecho, serán debates prácticos que se darán en la elaboración de las leyes, así como en el dictado de las sentencias. Sin duda es un tiempo muy interesante para dedicarse al constitucionalismo; veremos cómo se construye un constitucionalismo mexicano renovado, presenciaremos su nacimiento y, con un poco de suerte, participaremos en él.
En próximas entregas me ocuparé de alguna de estas preguntas, con la idea de exponer algunas ideas a la discusión pública, sin mayor pretensión que tratar de contribuir a una construcción común de sentidos de lo constitucional.
¿Sumaría otra pregunta? ¿cuál?