foro jurídico Historia mínima de La Suprema Corte de Justicia de la Nación

Sobre “La Suprema Corte de Justicia de México”

Este libro, escrito por Pablo Mijangos y González, es de esos textos que uno quiere leer en cuanto llegan, pero que, entre el trabajo, las clases y otras lecturas pendientes, deben aguardar un tiempo mientras se les lanzan miradas ansiosas de vez en vez.

Y, como lo presentía, me topé con un libro estupendo.

Mijangos, abogado e historiador, ha logrado una obra redonda. En cuanto a la forma, porque se lee con facilidad y rapidez, ya que su pluma corre sin sobresaltos a lo largo de las páginas; en cuanto al fondo, porque su abordaje es completo, su análisis certero y su criterio atinado. Usando una palabra antigua pero exacta, diría que logró un libro compendioso.

Es un texto histórico en cuanto narra el nacimiento y la vida de nuestra Corte azarosa, y por eso sigue un orden cronológico, seguramente sabe el autor que en este tipo de obras no conviene ponerse “creativo” con la estructura. Es un libro jurídico ya que nos presenta las principales decisiones del alto tribunal en cada época, precisando sus causas y efectos. Es un libro político pues explica cómo las diversas etapas de nuestra vida pública han influido, y se han visto influidas, por los supremos y las supremas de la Suprema.

Tres libros en uno.

En ese sentido, el volumen de Mijangos me recuerda a otros dos acuciosos juristas historiadores con ojo político, como fueron Emilio Rabasa y Daniel Cosío Villegas. En esa línea del mejor constitucionalismo nacional se inscribe “La Suprema Corte de Justicia de México”.

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Decía don Jesús Reyes Heroles que “quien solo sabe derecho, sabe muy poco derecho”, y sin duda tenía razón. Aún las creaciones jurisdiccionales están marcadas por su tiempo, por la realidad social que se vive, por las inquietudes políticas e intelectuales de una era. Quienes juzgan no son ajenos a lo que ven y viven todos los días, más allá de las peticiones de las partes, y eso se nota en este libro.

¿Quiénes pueden disfrutar y aprovechar su lectura? Toda persona interesada en el papel que juegan las cortes en el estado moderno, particularmente en México; también quienes estén interesados profesionalmente en la evolución del Poder Judicial nacional.

¿Es un libro exclusivo para la academia jurídica? No me lo parece. Su lenguaje claro permite que cualquiera que tenga conocimientos medios de política lo entienda; pierda usted cuidado, no se va a enfrentar a un tomo lleno de palabras técnicas y de latinismos.

Al sopesar cada época (judicial y política) queda la impresión de que Mijangos y González ha sido justo, porque su razonamiento equilibrado no usa las virtudes como una alfombra bajo la cual esconder los defectos. Realiza una apreciación personal de los y las juristas que han integrado la Corte, cuando esto ha resultado necesario para entender las decisiones tomadas.

Incluso en el debate de si la historia la hacen las personas o las instituciones, el libro resulta ponderado.

La conclusión que me deja (a cada quien le quedará una) es que la labor de nuestra Suprema Corte nunca ha sido fácil, y jamás ha estado ajena a la realidad pública; que es una especie de vaso regulador entre el derecho (o los derechos) y la política que requiere personas juiciosas y prudentes para integrarla, que sepan ejercer las facultades amplísimas que tienen con auténtica visión de estado.

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