La historia en México y de varios países del mundo, nos ha hecho saber que la marihuana tiene consecuencias nocivas para la salud en cualquier ser humano, ya que puede producir dependencia física y la alteración del correcto funcionamiento del cerebro, entre otras cosas, sin embargo, en las comisiones parlamentarias de México, se han presentado iniciativas de ley sobre la marihuana, tanto en ámbitos locales como en el federal.
Dichas iniciativas han contemplado la otorgación de permisos para el autocultivo, la descriminalización de la posesión con fines de uso personal, la legalización de su uso médico, etc.
Para entender un poco más del tema, debemos de definir la despenalización y la legalización, ya que no son lo mismo.
Podemos decir que la despenalización es la supresión del carácter penal de un acto que se considera ilegal, es decir, que no se tipifique como delito una conducta.
Por lo que respecta a la legalización, entendemos que es el acto mediante el cual esa conducta o parte de ella se vuelven legales o aceptadas dentro de la jurisprudencia y de la justicia de una región, dejando así de ser ilegales y/o prohibidos, yendo de la mano con algún tipo de norma que regule tal conducta.
En palabras más simples cuando hablamos de despenalización, nos referimos a que tal conducta tenía aparejada una sanción penal, la cual fue eliminada, pero no regulándola más allá ni reconociendo que tal conducta sea lícita y al momento de hablar de legalización se incorpora dentro del ordenamiento jurídico ésta conducta como lícita a través de leyes, decretos, o el cuerpo legal que se estime conveniente, regulando así su comercio, posesión, entrega, facilitación, etc.
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Al respecto, tenemos como antecedentes lo que el Ministro de la Suprema Corte de Justicia Arturo Zaldívar, propuso en un proyecto de resolución para autorizar el consumo de marihuana con fines lúdicos a raíz de un amparo presentado por integrantes de la Sociedad Mexicana de Autoconsumo Responsable y Tolerante (SMART).
Así mismo, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) autorizó la importación de un medicamento de aceite de marihuana para tratar a Grace Elizalde, una niña de Monterrey enferma con el síndrome de Lennox-Gastaut, a causa del cual sufre de cientos de crisis epilépticas al día.
Otro antecedente que tenemos en esta opinión, es la del actual titular de la Secretaría de Turismo, Enrique de la Madrid, quien sugirió legalizar la marihuana en el país. En el mismo sentido lo hizo Juan Ramón de la Fuente, exrector de la UNAM y también antiguo Secretario de Salud, ya que se pronuncio en el sentido de que en México existen las condiciones necesarias para la legalización de la marihuana, a lo que también se han manifestado a favor el expresidente Vicente Fox y otros secretarios de Estado.
En tiempos más recientes el pasado 21 de agosto del 2018, la exministra Olga Sánchez Cordero, participó en el seminario sobre violencia y paz en México, ahí señaló que el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, le dijo que: “tenía carta abierta, lo que sea necesario para pacificar este país, abramos el debate”.
Luego de que la ex ministra Olga Sánchez Cordero, se mostrara de acuerdo con esta medida, ahora ha sido Alfonso Durazo, propuesto por López Obrador, como el próximo secretario de Seguridad Pública quien se pronunció a título personal a favor de la legalización de la marihuana para uso lúdico y médico, mismo que dijo:
“…No todos somos expertos en el tema y aquí abordaremos políticas de drogas y pacificación para esbozar cuál deberá ser la política para ayudar al proceso de pacificación y reconciliación nacional, son 50 expertos, hay un cuerpo de relatores y aquellas propuestas que generen el mayor consenso en la mesa tendrán mayores posibilidades de convertirse en políticas públicas”.
Dicho lo anterior, la despenalización no significa que la gente pueda usar drogas con impunidad y la legalización significa que los consumidores no se enfrentan a ninguna pena.
A manera de conclusión, podemos decir que en México, es necesario abrir un debate nacional sobre el tema y se pueda legislar a conciencia para dar un marco jurídico adecuado a las necesidades de la sociedad en general, el nuevo Gobierno Federal, deberá de poner las reglas básicas para ello y hacer que exista certidumbre en la población de los pros y contras que traerá como consecuencia el legalizar y despenalizar o no la marihuana, basado en un adecuado Programa Nacional e Internacional para el Control de las Drogas.
También debemos tomar en cuenta que el legalizar o despenalizar la marihuana traería como consecuencia un libre mercado negro para vender y comprar en cualquier sitio además de que no por ese hecho se terminaría con la inseguridad y la delincuencia, así que se tiene que valorar para que México y los mexicanos vivamos en paz y para hacerlo hay que explorar todas las alternativas con sus puntos a favor y en contra.
