Con el arribo del Ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá al Máximo Tribunal de nuestro país, la 4T tiene presencia dentro del Poder Judicial de la Federación. Sin embargo, para algunos puristas de la ciencia jurídica, la 4T pudo haber llegado plenamente a esta institución con la elección del Ministro Arturo Zaldívar Lelo de Larrea como Presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), un jurista de ideología liberal y de tono conciliador.
No es un secreto que el Ministro Presidente Zaldívar es uno de los juzgadores que ha establecido una línea de corte liberal sobre la cual se han conducido sus decisiones y sentencias. Por esta razón, se le podría llegar a considerar afín a los ideales del nuevo titular del Ejecutivo Federal, aunque fue propuesto por el ex Presidente Calderón. Sin embargo, los últimos embates que se han propinado desde el ejecutivo harán que el Ministro Presidente defienda la autonomía del Poder Judicial, desde el punto de vista institucional.
Desde una perspectiva eminentemente puritana y de ideología, para que se actualizara un verdadero sistema de pesos y contrapesos, se hubiera recomendado la elección de un Presidente de ideología conservadora moderada como el Ministro Pardo Rebolledo o como del Ministro Pérez Dayán, quien declinó de última hora para participar de la elección. Pero, para los tiempos de polarización que se están viviendo en los últimos días, era necesario poner a la cabeza del Poder Judicial y como representante de los juzgadores, a alguien que pudiera entenderse con el presidente López, el indicado: Arturo Zaldívar.
Aunque el Ministro Presidente Zaldívar es uno de los llamados “externos” sus aptitudes y el trabajo que ha desempeñado en la SCJN denotan la esencia de un juzgador de excelencia, quien además, es admirado por aquellos que llevan toda una carrera dentro de la función jurisdiccional. Ello, da un síntoma de empatía entre dichos funcionarios y el Ministro Presidente, habiendo un ambiente de tranquilidad dentro del Poder Judicial, pues la elección de Zaldívar Lelo de Larrea es un acierto para la defensa de los juzgadores ante los Poderes de la Unión.
Aunque la SCJN es un órgano eminentemente jurisdiccional, su papel en el sistema político mexicano ha tomado una mayor relevancia en los últimos años, por el impacto y las consecuencias que sus diferentes decisiones han traído y pueden tener en las leyes y acciones de gobierno. Por esta razón, es importante que el presidente López evite confrontación alguna con los representantes del Poder Judicial de la Federación, quienes sin duda alguna serán defendidos por el Ministro Presidente Zaldívar, pues aunque se encuentren puntos de convergencia entre estos dos personales, este último tiene bajo su espalda toda una institución que exige respeto a su autonomía y a su trabajo.
Las preguntas que quedan en el aire son: ¿Qué canales de comunicación utilizará la SCJN para retomar la confianza de los justiciables hacia los Jueces, Magistrados y Ministros? ¿Cómo cambiará la relación Ejecutivo – Judicial? ¿A quién se propondrá para suceder a la Ministra Margarita Luna Ramos?
Esperemos…
