Jorge Leonel Wheatley Fernández, director general del Registro Nacional de Población e Identidad (Renapo) de la Secretaría de Gobernación (Segob), dio a conocer que -aproximadamente- en tres o cuatro años, México podrá transitar de manera confiable y certera a la identidad digital, aprendiendo a utilizar de manera óptima la tecnología y sus mecanismos.
En el primer día del parlamento virtual Análisis sobre la iniciativa de identidad y ciudad digital, organizado por la Comisión de Gobernación y Población, el legislador recordó que en nuestro país existen miles de personas que no cuentan con registro de nacimiento, es decir, “entre uno y cinco millones; dentro de dicho grupo, seis de cada diez son niñas, niños y adolescentes; tres de cada diez, son personas adultas entre 18 a 59 años, e incluso la cifra de no registro alcanza el 23 por ciento en población que se autoadscribe indígena”.
Jorge Wheatley expuso que el comienzo para alcanzar un modelo de cédula única de identidad es que “los datos personales sean de las personas, el gobierno de México y Renapo, en este caso, sólo será el depositario de éstos y garante de su protección, disponibilidad y uso por parte de su titular, brindando los mecanismos físicos y digitales para acreditar identidad y hacerla oponible ante terceros”.
Por último, el titular del Registro Nacional, aseguró que el objetivo es dotar a la ciudadanía de identidad para que tengan acceso a derechos, servicios digitales, uso seguro de las tecnologías de la información, a fin de combatir el robo de datos; así como dar certeza a las personas, autoridades, al sistema financiero, al sector social y privado de que un individuo es quien dice ser.
“Por primera vez en la historia, el país va a poder acreditarlo y garantizarlo de manera fehaciente”, finalizó Wheatley Fernández.